El hombre que vino en el caos de la Segunda Guerra Mundial, este gigantesco canal de dientes afilados logró deslizarse fuera de las revistas científicas en la oscuridad de las leyendas locales.
Escocia, una vez más, resulta ser el lugar de descanso preferido de las bestias del mar misterioso que han partido de este mundo. Si bien el caso más notorio de la fauna extraña de lavado para arriba en una línea de costa escocesa es, probablemente, la del 1954 isla montruo de canvey este notable (y por la mayoría de las cuentas, muy mal olor) de la canal fue descubierto en 1942, a lo largo de las costas de Gourock, con vistas al río Clyde.
Un oficial del Consejo por el nombre de Charles Rankin, se encargó de tomar notas detalladas sobre esta bestia. De medición a una longitud de más de 27 pies, este animal fue descrito por Rankin con gran detalle. Sus características más notables incluyen una cabeza pequeña, aplanada que afilado a un punto con arcos superciliares pronunciada situada sobre los ojos lateralmente raja.
mandíbulas de la criatura se informa llena de dientes grandes, señaló. El cráneo se encuentra encima de un cuello largo, que conectaba a una columna vertebral parcialmente expuesto. tronco del animal todavía llevaba dos pares de lo que han sido descritos como aletas en forma de L, que fueron menores en un primer plano-poción, que la parte posterior. La columna vertebral disminuirse el tiempo en una cola larga y rectangular.
Según Rankin, la piel de la criatura albergaba una gran cantidad de tiempo de 6 pulgadas, pluma-como las cerdas y su aspecto era de reptil en nature.This reptiles rostro - junto con las cuatro aletas, morro afilado y la cola amplia - nos lleva a considerar la posibilidad que esta criatura podría ser una reliquia de reptiles marinos conocidos como los mosasaurios.
Cualquier información adicional con respecto a este animal fascinante fue, por desgracia, enterrados poco después de su descubrimiento, ya que el cadáver fue descuartizado y enterrado en un lugar no revelado.
Además decepción espera investigadores como resulta Rankin se le negó el derecho a fotografiar a la criatura, debido al hecho de que pasó a ser varado en lo que fue considerado como un área clasificada. Ser como Escocia - junto con el resto de Europa y la mayor parte del mundo - se vio envuelto en la guerra de la segunda palabra, esta violación de la seguridad no se le permitió.
El esfuerzo de la guerra también se consume el tiempo de científicos muchos de los que de otro modo podrían haber estado predispuesto a investigar este asunto. En la actualidad, el canal Gourock debe ser atribuido a un caso más de una oportunidad perdida para la ciencia para iluminar los misterios más increíbles de nuestros océanos.
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